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Durante la última década, hemos visto un crecimiento importante en la llamada economía colaborativa, en la cual se adquieren, proveen o comparten bienes y servicios a través de una comunidad en línea. De acuerdo con un estudio de Juniper Research publicado en julio del 2017, este nuevo modelo económico podría alcanzar un valor de 40,000 millones de dólares para el 2022, confirmando el potencial de esta tendencia.

En el ramo inmobiliario podemos observar un claro ejemplo de la economía colaborativa en los espacios de co-working, que desde hace algunos años han estado presentes en múltiples ciudades de México. Y ahora, esta tendencia se está extendiendo a los espacios de vivienda, con un nuevo concepto llamado co-living.

Co-living: la nueva tendencia en vivienda colaborativa

El co-living nació en Silicon Valley, y gira en torno a la idea de crear una comunidad inspiradora y participativa. En ella se optimizan espacios, al tener amplias áreas comunes compartidas entre múltiples habitantes. La gran mayoría de estos nuevos espacios están orientados a estudiantes y profesionistas jóvenes, que buscan nuevas oportunidades en ciudades cosmopolitas, pero se ven restringidos económicamente debido a los altos precios de renta y compra de inmuebles.

Los espacios para vivienda co-living funcionan como una mezcla entre un hostal y un centro de co-working, en el cual los inquilinos cuentan con un espacio privado para habitar, y el resto de las zonas son comunes y de uso libre.

Esta nueva tendencia en vivienda funciona de maravilla para los llamados nómadas digitales, cuya profesión les permite trabajar desde cualquier parte del mundo, siempre y cuando cuenten con una conexión a internet.

La gran ventaja de estos espacios es que proporcionan un lugar donde diversas personas con ideas afines pueden colaborar para generar una red de contactos y experiencias únicas. Asimismo, al ser un espacio ya amueblado y que funciona de manera similar a un hotel, el inquilino se evita costos adicionales tales como mudanzas, seguros, mes de depósito, entre otros.

Características principales del co-living

  • Las áreas interiores, tanto individuales como compartidas, se entregan totalmente equipadas y amuebladas.
  • Algunas empresas de co-living ofrecen servicios adicionales como limpieza de la habitación, estacionamiento privado, etc.
  • Se pueden manejar distintos tiempos de estancia. La mayoría de los co-living ofrecen un período mínimo de 6 meses, sin solicitar aval.
  • Si la empresa de co-living cuenta con otras sucursales, es posible tener acceso a las zonas comunes de los otros edificios, ya sea en la misma ciudad o en diferentes localidades.
  • Existe la figura de community manager, quien es el encargado de asegurarse que los habitantes tengan una excelente experiencia. Se encargan de organizar eventos sociales y actividades periódicas dentro de las instalaciones.

Como puede observarse, el co-living es una tendencia de construcción que ha llegado para quedarse. En México, este tipo de vivienda está comenzando a hacer presencia en CDMX, y pronto llegará a otras urbes como Monterrey y Querétaro.